El alma no crece en los árboles, sin embargo, se nutre
de nuestro entorno, como el cuerpo de la comida.
El alma necesita ser alimentada con visiones hermosas,
palabras que llenen, o por quien sabe besar el alma.
Besar el alma es saber tener paciencia, comprensión,
y nunca juzgar a nadie, simplemente aceptar
a las personas como son.
Besar el alma es abrazarse cuando hay soledad,
cuando se está triste. Sin decir nada, solo sostenerse
con ese abrazo de apoyo.
Besar el alma, es sentarse juntos cuando
no hay necesidad de hablar, cuando solo
hace falta el silencio, al no hacer preguntas.
Besar el alma, es sentir otras manos que dan apoyo
fortaleciendo esa esperanza de vida y de compañía.
Besar el alma, es decir un Te Amo con la mirada.
Besar el alma, es fácil, solo basta que decidamos
bajar del pedestal del orgullo que muchas veces
nos rodea y nos consume.
Besar el alma… ¡Cuántos de nosotros necesitamos
de ese beso en el alma que nunca llega!
Pero mientras llega ese beso:
¡BESA tú el Alma de los demás y pon el corazón en tu mirada!
PROGRESO
COMARCA LAGUNERA